En la actualidad disponemos de una enorme cantidad de opciones para redecorar nuestro hogar, y una de las elecciones que muchas veces se nos pasa por alto son las manillas de las puertas de interior. Por eso en este artículo os daremos las claves para escoger las manillas que mejor se adapten al estilo decorativo de tu hogar y que mejor se ajusten a tus puertas.
Has de tener en cuenta que muchas de las puertas de interior que compres vendrán con unas manillas estándar, pero si estas no te gustan no tienes por qué conformarte con ellas, pide que te las cambien por otras, hay una infinidad de opciones para elegir. Por ejemplo, para crear ambientes campestres puedes personalizar tus puertas de interior rústicas con manillas de estilo rústico, les darán un estilo más refinado y distinguido sin gastar demasiado dinero.
Además del modelo de manilla también podemos elegir el color y si el acabado será brillo o mate. Debes saber que las manillas en brillo se suelen quedar marcadas las huellas y tienden a rallarse más, pero cuando están limpias son preciosas. Las manillas en mate, en cambio, no tienen este inconveniente, te parecerá que siempre están perfectas.
Es importante elegir una manilla con un diseño adecuado a la puerta, pero no te olvides de conseguir un equilibrio entre funcionalidad y forma. Por una parte los pomos giratorios son muy baratos pero con el tiempo acaban aflojándose. Lo bueno que tienen los pomos es que son muy fáciles de manejar, algo a tener en cuenta si en la casa viven niños o ancianos. Si necesitas ocultar algunos agujeros en la puerta puedes usar manivelas con escudo de placa. Si tienes puertas correderas se suelen utilizar más los manillones y tiradores ya que estos son muy fáciles de manejar. Como ves hay muchas funcionalidades a tener en cuenta a la hora de escoger las manillas de nuestras puertas de interior, por eso es tan importante estudiar bien su funcionalidad antes de decantarnos por unas u otras.
Otra gran cuestión es cuál es el material más apropiado para las manillas de nuestras puertas de interior. Cada material tiene ciertas ventajas pero también algunos inconvenientes, veámoslos:
- Manillas de acero inoxidable: Son manillas de mucha calidad, ya que este material tiene mucha durabilidad, no pierde brillo, no se oxida y no se pela. Por contra, el acero es un material difícil de moldear, por lo que no se podrán conseguir complejos acabados en el diseño.
- Manillas de latón: Al contrario que el acero el latón sí que permite conseguir formas y acabados más complejos, pero su vida útil es más limitada y a largo plazo se deteriora más que el acero.
- Manillas de zamak: Es el material más barato de todos y tiene un aspecto muy parecido al latón, además es muy fácil de moldear por lo que permite obtener manillas de formas muy complejas.
- Manillas de aluminio: Tienen mejor calidad que las manillas de zamak y pesan menos, pero ofrecen menos posibilidades de acabados y son más caras.
