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Fabricación, Diseño e Innovación para tu Hogar

¿Rodapié Blanco? ¿Rodapié Alto? ¡Aquí están!

Para decorar un hogar siempre necesitaremos un buen y bonito rodapié, por ello aquí te mostramos una gran selección de los mejores Rodapiés Blancos y Rodapiés Altos del mercado, los más populares entre nuestros clientes para que sólo tengas que elegir el Rodapié Blanco y el Rodapié Alto que más te guste y nosotros te lo enviamos a tu hogar.

11 productos
Esquinera para Rodapié Blanco
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10 Tiras Rodapié Blanco Mod. C1
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10 Tiras Rodapié Blanco Mod. C2
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10 Tiras Rodapié Blanco Mod. C4
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10 Tiras Rodapié Blanco Mod. C5
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229.9€/paquete
Rodapié Blanco de Paneles Mod. C6
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Rodapié Zócalo Blanco Mod. C9
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Rodapié Blanco Melamina (Paquete)
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Rodapié Roble Blanco EW Melamina (Paquete)
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Rodapié Roble Crema 14 Melamina (Paquete)
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Rodapié Blanco Lacado (Paquete)
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Un buen rodapié blanco es como el maquillaje perfecto: realza la belleza de cualquier estancia sin robarse el protagonismo, pero dejando claro que algo se ha hecho con gusto y mimo. Y dentro de las opciones que existen, en BricoValera tenemos los dos reyes indiscutibles del estilo: el rodapié laminado y el lacado. Dos opciones que, aunque se parezcan a simple vista, juegan en ligas muy distintas.

Rodapié Blanco Laminado: Práctico, resistente y a la última

Piensa en el rodapié laminado como la opción ideal si buscas un acabado impecable y sin complicaciones. Está hecho con MDF rechapado y recubierto con una capa laminada que le da un aspecto uniforme, resistente y... bueno, perfecto para estancias de mucho trote. ¿Tienes niños que corren como si no hubiera mañana? ¿Mascotas a las que les encanta rozar las paredes? Este rodapié lo aguanta todo.

Además, el blanco laminado tiene ese brillo satinado que refleja la luz y da un toque moderno a cualquier estancia. Y, por supuesto, se limpia en un plis plas. Vamos, que te olvidas de manchas, marcas y arañazos como quien pasa de puntillas. ¡Instalarlo y olvidarte!

Rodapié Blanco Lacado: La elegancia a otro nivel

Ahora bien, si lo que quieres es darle a tu casa ese toque de lujo que no todo el mundo tiene, el rodapié blanco lacado a mano es tu elección. Sí, cuesta un poco más, pero cuando veas el acabado, entenderás por qué. Porque este no es el típico rodapié que encuentras en cualquier lado.

Estamos hablando de MDF rechapado y lacado a mano con una precisión que se nota. El resultado es un blanco impoluto, con un acabado suave como el terciopelo y una resistencia superior. No hay cantos levantados, ni brillos artificiales. Aquí todo se hace con cariño y detalle.

Cada rodapié lacado pasa por un proceso artesanal que le confiere una durabilidad y estética premium. ¿Te imaginas tener un rodapié que no solo se ve bien, sino que también se siente bien? Con cada pasada de mano notarás la calidad y la diferencia. Es como comparar un traje de sastrería con uno de fábrica. No hay color.

¿Por qué elegir uno u otro?

  • ¿Buscas practicidad sin renunciar a la estética? El rodapié blanco laminado es el todoterreno que te acompaña en el día a día.
  • ¿Prefieres un acabado de alta gama que hable de buen gusto y detalles cuidados? Elige el lacado. No es solo un rodapié, es una declaración de estilo.

Así que, si quieres ese toque que haga de tu casa un lugar único, no lo dudes. Elige entre la practicidad del laminado o la elegancia atemporal del lacado. Ambos blancos, sí. Pero cada uno con su carácter propio, listo para darle a tu casa ese extra que la hará destacar.

¡Anímate y dale a tus paredes el detalle que se merecen!

Porque un rodapié no es solo “una línea blanca en el suelo”. Es el remate perfecto de cualquier estancia. ?

Elegir el rodapié blanco adecuado para cada cliente puede parecer una tarea sencilla, pero en realidad hay que saber hacer las preguntas correctas. Porque no es lo mismo el rodapié que se pone en una casa de familia numerosa que el de un despacho de diseño, ¿verdad?

Así que vamos a ver cómo guiar al cliente hacia la elección que realmente le conviene. Y cuando lo haga, que sienta que le hemos leído la mente.

1. Define el uso y la ubicación: ¿Dónde va a ir ese rodapié?

Antes de nada, hay que entender el contexto. Si va a ir en un salón de diario donde los niños y las mascotas pasan el día jugando, el rodapié tiene que ser resistente. En ese caso, lo más recomendable es el rodapié blanco laminado. Es fuerte, aguanta golpes y arañazos y se limpia en un pispás.

Pero si el cliente lo quiere para un dormitorio, un recibidor o una oficina donde se busca más estilo y elegancia, el lacado es el rey. Porque aquí lo que prima es la estética, la suavidad del acabado y ese toque premium que le da a la estancia.

Pregunta mágica: ¿Este rodapié va a estar en una zona de mucho uso, o prefieres priorizar el acabado estético?

2. ¿Qué nivel de mantenimiento y cuidado estás dispuesto a darle?

Los rodapiés laminados son prácticamente indestructibles. Un trapo húmedo y listo. Sin más historias. Pero los lacados, al tener un acabado más delicado, requieren un poquito más de atención. No se rayan fácilmente, pero si el cliente no es de los que cuidan las cosas como si fueran joyas, mejor evitar problemas y recomendarle el laminado.

Pregunta mágica: ¿Prefieres un rodapié que aguante el trote diario o uno con un acabado de revista, aunque requiera un poco más de mimo?

3. Estilo de la casa y nivel de acabado: ¿qué sensación quieres que transmita?

El lacado a mano es una opción para quienes quieren destacar. Para quienes buscan que hasta el rodapié sea una declaración de estilo. Si el cliente es de los que cuidan cada detalle de la decoración, que no tiene miedo a gastar un poco más para conseguir un acabado superior, el lacado es su opción.

El laminado, en cambio, es más neutro. Ofrece un buen resultado estético y combina con casi cualquier ambiente. Y además, se adapta a cualquier presupuesto.

Pregunta mágica: ¿Te interesa un rodapié con un acabado superior que marque la diferencia, o prefieres algo versátil y funcional que encaje bien en cualquier espacio?

4. Presupuesto: ¿Cuánto te quieres gastar?

Porque, sí, al final el bolsillo también manda. El laminado es más económico y ofrece una relación calidad-precio excelente. Pero si el cliente busca algo con un toque más exclusivo y está dispuesto a invertir un poco más, el lacado será la elección perfecta.

Aquí la clave es ser transparente: explicar las diferencias de precios y dejar claro que ambas opciones tienen su valor, pero que, lógicamente, el acabado lacado a mano cuesta más porque su proceso es más laborioso y de mayor calidad.

Pregunta mágica: ¿Te interesa conocer opciones con precios más ajustados, o buscas un rodapié de alta gama y no te importa invertir más?

5. ¿Qué altura y grosor prefieres?

Hay que tener en cuenta las proporciones de la estancia. Si el cliente busca algo que pase desapercibido y no invada visualmente la habitación, tanto el laminado como el lacado en alturas estándar (7-10 cm) irán perfectos. Pero si quiere algo más imponente y que le dé un toque de diseño a la pared, los lacados suelen estar disponibles en alturas más altas (12 cm o más), ideales para destacar en espacios amplios.

Pregunta mágica: ¿Prefieres un rodapié discreto y sutil, o buscas algo más alto y decorativo que llame la atención?

Resumen:

  • Rodapié blanco laminado: perfecto para casas con niños, mascotas, zonas de alto tránsito o clientes que buscan algo fácil de limpiar, resistente y económico.
  • Rodapié blanco lacado: la opción premium para clientes que valoran la estética y el acabado superior, y que quieren un detalle que eleve el estilo de su casa.

Con estas preguntas y enfoques, tendrás al cliente diciendo “¡Sí, eso es justo lo que necesito!” antes de que se dé cuenta. ?

¿Como es un rodapié blanco?

Un rodapié blanco suele ser de MDF (tablero de fibra de densidad media) y laminado blanco. También pueden ser lacados, bien lacados directos encima del MDF o encima del laminado, esta última es la mejor opción de todas.

¿Qué ventajas tiene el MDF sobre otros materiales?

El MDF es más económico que la madera maciza, es fácil de trabajar y cortar, y tiene una superficie lisa ideal para pintar. Además, no se deforma tan fácilmente con cambios de temperatura.

¿Se pueden pintar los rodapiés de MDF?

Sí, los rodapiés de MDF se pueden pintar fácilmente. Vienen con una superficie lisa que acepta bien la pintura, permitiendo personalizar su color. Podemos entregarlos ya lacados o tu después aplicarles colores...

¿Qué altura de rodapié debo elegir?

La altura del rodapié depende del estilo de tu hogar y de tus preferencias. Generalmente, se encuentran entre 7 y 15 cm de altura, pero hay opciones más altas para un aspecto más elegante.

¿Cómo se instalan los rodapiés de MDF blancos?

Los rodapiés de MDF blancos se pueden instalar usando adhesivo de montaje o clavos. Es importante medir y cortar con precisión, y asegurarse de que estén alineados correctamente con el piso y las puertas.

¿Se pueden utilizar en cualquier habitación?

Sí, los rodapiés de MDF blancos son adecuados para cualquier habitación interior, pero es recomendable evitar su uso en áreas con mucha humedad, como baños sin una buena ventilación.

¿Qué cuidados necesitan los rodapiés de MDF blancos?

Los rodapiés blancos de MDF necesitan un mantenimiento básico como limpieza regular con un paño húmedo. Evita el uso excesivo de agua y productos de limpieza abrasivos o te durarán poco...

Fermin Aparicio

COORDINADOR GERENTE DE PRODUCCIÓN

Siempre en busca de la mejora, dedico todo mi tiempo en optimizar productos y procesos para ser más eficientes. En mi tiempo libre me gusta viajar y descubrir mundo.