Ventanas de Madera Rústicas
Las ventanas de madera artesanales de siempre, mejoradas con juntas de goma y herrajes robustos. Son ventanas de madera rústicas que se hacen a medida, con el color de acabado que quieras y el color de herraje que te guste. Pide ahora tus nuevas ventanas de madera rústicas y disfruta de un producto para toda la vida.
Ventana 60 x 50 cm Europea Madera Pino Teñida 1 Hoja con Ventanillo Huelva
Ventana 90 x 70 cm Europea Madera Pino Crudo 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 100 x 50 cm Europea Madera Pino Barnizada 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 60 x 70 cm Europea Madera Pino Teñida 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 90 x 70 cm Europea Madera Iroko Barnizada 1 Hoja con Ventanillo Huelva
Ventana 100 x 60 cm Europea Madera Iroko Teñida 1 Hoja con Ventanillo Huelva
Ventana 60 x 50 cm Europea Madera Iroko Crudo 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 80 x 70 cm Europea Madera Iroko Barnizada 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 90 x 70 cm Europea Madera Iroko Teñida 1 Hoja con Ventanillo Huesca
Ventana 130 x 100 cm Europea Madera Pino Crudo 2 Hojas con Ventanillo Huelva
Ventana 120 x 120 cm Europea Madera Pino Barnizada 2 Hojas con Ventanillo Huelva
Ventana 120 x 100 cm Europea Madera Pino Teñida 2 Hojas con Ventanillo Huelva
Ventana 80 x 80 cm Europea Madera Pino Crudo 2 Hojas con Ventanillo Huesca
Ventana 100 x 80 cm Europea Madera Pino Barnizada 2 Hojas con Ventanillo Huesca
Ventana 130 x 100 cm Europea Madera Pino Teñida 2 Hojas con Ventanillo Huesca
Ventana 80 x 100 cm Europea Madera Iroko Crudo 2 Hojas con Ventanillo Huelva
Ventana 100 x 100 cm Europea Madera Iroko Barnizada 2 Hojas con Ventanillo Huelv...
Ventana 120 x 120 cm Europea Madera Iroko Teñida 2 Hojas con Ventanillo Huelva
Ventana 100 x 80 cm Europea Madera Iroko Crudo 2 Hojas con Ventanillo Huesca
Ventana 130 x 140 cm Europea Madera Iroko Barnizada 2 Hojas con Ventanillo Huesc...
Ventana 130 x 100 cm Europea Madera Iroko Teñida 2 Hojas con Ventanillo Huesca

La tendencia del estilo rústico: hogar acogedor y luminoso
Para empezar conviene sumergirse en los entramados del diseño de interiores y en las tendencias de los últimos años. Entre ellas siempre vemos que destacan el diseño minimalista o el noruego que se basa en las líneas sencillas y las maderas claras.
Este estilo permite aprovechar espacios pequeños o con poca luz y sacarles provecho. Y es por esto por lo que está tan demandado. Sin embargo, a la par de este estilo se sitúa el diseño rústico. Si bien es cierto que se le saca más partido en un hogar más amplio y luminoso, este estilo puede ser para todas las casas. ¿Qué lo hace tan especial?
Para responder a la pregunta hay que pararse a analizar esta manera de decorar el interior de un hogar, y en ocasiones el exterior. El diseño rústico tiene como principal elemento la madera, preferiblemente madera oscura, sin tratamiento y que sea lo más natural posible. Así como el pino, la haya o el fresno serán maderas escogidas para la decoración minimalista por su claridad, en el diseño rústico priman el roble oscuro, el nogal o el wengué africano. Todas ellas maderas de colores profundos, oscuros y penetrantes.
No solo importa la tonalidad, sino que un factor imprescindible será que la madera sea lo más natural posible. Es decir, que no haya recibido tratamientos muy agresivos, que no sea uniforme o incluso que pueda tener vetas o taras propias de su origen.

En el estilo rústico este tipo de madera se emplea en multitud de lugares de la casa. Puede ser en las puertas, en las ventanas - como veremos más adelante -, en los muebles e incluso en el techo. Dejar vigas a la vista, añadir pasamanos de madera a las escaleras y, por supuesto, elegir mesas con madera natural, bien sean de comedor o de café dará a la casa un toque rústico.
Pero si se busca un look para la casa completamente rústico habrá que apostar por las grandes opciones: el techo, con las vigas de madera al aire; la puerta, de madera natural con remaches de acero, y las ventanas, que completarán un ambiente acogedor que acerque al hogar la paz y armonía de la montaña.

Las ventanas como elemento de decoración rústico
Las funciones de las ventanas son muchas, desde el aislamiento térmico hasta la seguridad de una habitación. Además, es innegable que una casa con ventanas amplias permite la entrada de luz y crear un ambiente acogedor e idílico. Sin embargo, su valor va más allá de la propia función y se adentra en la decoración. Hoy en día uno de los estilos importantes es el rústico y las ventanas también se pueden adaptar a él.
Las ventanas forman parte imprescindible de la casa. De hecho ocupan un espacio tan importante que son un elemento por el cual se mide o se valora la calidad de una casa. Si una vivienda tiene ventanas grandes, bien distribuidas, con materiales resistentes y una alta seguridad, será un aliciente para la compra y se podrá subir su precio.
Por el contrario un piso con pocas ventanas, pequeñas y materiales baratos y poco eficientes resultará en una vivienda que nadie quiera adquirir y será imposible, o al menos llevará mucho más tiempo su venta.
Las ventanas de madera rusticas como elemento de decoración son una de las tendencias actuales que mejor encajan y que están más demandadas.
Para poder combinarlas hay que pararse a pensar en qué tipo de vivienda se van a instalar, puesto que no es lo mismo querer aportar un ambiente rústico a una vivienda de ciudad o querer conseguir el diseño rústico en una casa en el campo o en una zona más rural.
Un hogar rústico en la ciudad
En el primer caso, una vivienda en una ciudad con aspecto rústico se puede conseguir fácilmente. Solo hay que tener claras las bases del diseño para el interior y elegir maderas de calidad para las ventanas del exterior.