❤️ Catálogo de Cocinas de leña

Tipos de cocinas de leña

Cuando piensas en cocinas de leña debes de tener en cuenta que existen en el mercado dos tipos con grandes diferenciaciones.

Cocinas de leña de obra

Las cocinas de leña de obra son las más económicas. Esto se debe a que tanto las paredes como el fondo de este tipo de cocinas son fabricadas por un albañil de ladrillo refractario y mortero.

La fundición de las cocinas de leña de obra se encuentra básicamente en la puerta del horno, en la puerta por la que se carga la leña y en el brasero que recoge las cenizas.

Cocinas de leña cerradas

Debido a la especialización que requieren las cocinas de leña de obra en la fabricación de las paredes y el fondo las cocinas de leña cerradas, las cocinas de leña cerradas son una opción altamente popular.

Estas cocinas de leña están completamente cerradas en fundición, todos los compartimentos están fabricados y listos para ser usados, tan sólo deberás de decidir donde instalarla para comenzar a disfrutar de ella.

Guía de compra de cocinas de leña con todo lo que debes de tener en cuenta.

Hay una serie de características, criterios y posibilidades sumamente importantes a la hora de decidirte por uno u otro modelo.

Tipos de cocinas de leña según su funcionamiento

Existen dos tipos de cocinas de leña según su funcionamiento, las cocinas de leña clásicas y las calefactoras.

Cocinas de leña clásicas

Son las cocinas de leña tradicionales, tienen una muy importante función cocinando tanto en su encimera como en el horno. Este tipo de cocinas de leña ofrecen una potencia entre 4 y 12 kW y además son totalmente capaces de calentar cualquier estancia y los espacios adyacentes.

Cocinas de leña calefactoras

 Son cocinas de leña con mucha más potencia, su principal función es que además de para cocinar calientan agua para un termo y para los radiadores, con si se tratase de una calefacción central.

Estas cocinas de leña pueden alcanzar hasta los 20 kW o incluso más. Se obtiene mediante la suma de la potencia del calderín para los radiadores y la potencia calorífica de la cocina de leña.

Potencia de las cocinas de leña

La potencia es uno de los criterios más importantes a la hora de decidirse por una cocina de leña de obra o una cocina de leña moderna. Está estrechamente relacionada con el mantenimiento que necesitará la cocina de leña y con la capacidad de calefacción y, por lo tanto, la comodidad en el hogar.

Está estrechamente relacionada con el mantenimiento que necesitará la cocina de leña y con la capacidad de calefacción y por lo tanto la comodidad en el hogar.

La potencia es sumamente importante para calentar la estancias, pero ni siquiera los modelos más potentes serán capaces de calentar estancias si el aislamiento no está bien realizado.

Rendimiento de las cocinas de leña, mejor rendimiento menor consumo.

El rendimiento no es más que un porcentaje que valora la relación entre la energía que las cocinas de leña consumen y las que producen.

Según la cocina de leña por la que te decidas el rendimiento oscila siempre es superior al 70%, y recuerda que nunca se obtendrá un rendimiento del 100% ya que la combustión nunca es completa, algunas cocinas de leña cuentan con un sistema de doble combustión que mejora notablemente el rendimiento.

Mejora el rendimiento de tu cocina de leña con una que cuente con un sistema de doble combustión.

La combustión doble es un sistema de algunos modelos de cocinas de leña y estufas de madera que permitirá un mejor aprovechamiento de energía y un control tanto de la temperatura como en el consumo de combustible.

Este proceso de doble combustión necesita de varias tomas de aire frío y varias salidas de aire cálido. El aire frío se encarga de estimular las llamas y optimizan la combustión de la leña mientras que el aire caliente se encarga de realizar la combustión de los gases que son emitidos por la cocina de leña.

Normalmente las cocinas de leña consiguen un rendimiento del 80% o incluso más, esto significa más calor con el mismo consumo, significa un mayor ahorro.

Tamaño de las cocinas de leña

El tamaño de la cocina de leña principalmente determina la medida de los troncos que podrás introducir dentro, nosotros recomendamos troncos de pequeñas dimensiones porque la combustión es mucho mejor. La combustión de los troncos, dependiendo de la medida de los mismos y del tipo de cocina de leña puede oscilar con un rendimiento apropiado desde 4 hasta 12 horas.

La rejilla regulable de las cocinas de leña

Puede parecer un elemento con poca importancia, pero se trata de la manilla que controla la potencia térmica de tu cocina de leña.

Un poco de historia de las cocinas de leña

Las primeras cocinas de leña tienen como origen aproximado hacia el año 1612, cuando a alguien se le ocurrió encerrar el fuego en unos ladrillos y taparlo con una placa de acero, las principales ventajas que obtuvieron son las de tener un lugar donde poder cocinar sin necesidad de usar ollas y obtener un rendimiento térmico mucho mejor.

Hacia 1630 aparecieron las primeras cocinas de leña, que sustituía la leña en la parte superior por carbón cuando se deseaba cocinar.

Fue alrededor de 1802 cuando se fabricó la primera cocina de leña de hierro colado que repartía el calor de forma perfectamente regular, prototipo que se cogió como modelo para la evolución de las cocinas de leña hasta los días actuales.

Ventajas de las cocinas de leña

Las principales ventajas de la cocinas de leña de Brico-Valera son que no necesitan de grandes cantidades de leña, ya que todas ellas disponen de un sistema de combustión lenta.

Las cocinas de leña son también un producto muy popular actualmente gracias al bajo impacto medioambiental que tienen. Su compromiso en total gracias a las bajas emisiones que todos los modelos tienen si los comparamos con otras cocinas eléctricas o de gas.

Si estás buscando cocinas de leña baratas o quieres una cocina de leña sin obra que se adapte a tu estilo, tenemos una amplia variedad que se ajustará perfectamente a tus necesidades. Desde cocinas de leña pequeñas hasta elegantes y robustas cocinas de leña modernas, te ofrecemos opciones para todos los gustos.

Si te digo que existe una forma de cocinar que no solo te llena el estómago, sino también el alma, ¿me creerías? Porque eso es exactamente lo que consiguen las cocinas de leña: recuperar ese sabor único de las recetas de la abuela, con un calor tan natural que envuelve toda la casa. No hablamos solo de un electrodoméstico para preparar comida, sino de un auténtico símbolo de hogar, tradición y, por qué no, de una manera diferente de disfrutar la vida.

Porque sí, en un mundo donde todo parece ir a la velocidad de la luz, las cocinas de leña son el antídoto perfecto para volver a conectar con lo simple, lo auténtico y lo de siempre. Encender la leña, esperar a que las brasas estén en su punto y cocinar a fuego lento es casi como un ritual que convierte cada plato en una obra maestra. Pero no solo eso. También te ofrecen una fuente de calor para tu casa, creando un ambiente cálido y acogedor que ninguna vitrocerámica o inducción podrá igualar jamás.

¿Qué es una cocina de leña y cómo funciona?

Aunque su apariencia pueda evocar tiempos pasados, las cocinas de leña modernas no se han quedado ancladas en el pasado. Se han reinventado para ofrecerte lo mejor de ambos mundos: el encanto de lo tradicional con la funcionalidad de la tecnología moderna. Básicamente, una cocina de leña es un aparato de combustión que te permite cocinar usando el calor generado por la leña, al mismo tiempo que calienta la estancia en la que está instalada.

El proceso es sencillo. Colocas la leña en una cámara de combustión, donde se enciende y comienza a arder. El calor que se genera se distribuye por toda la superficie de cocción –normalmente de hierro fundido–, proporcionando una temperatura uniforme perfecta para cocinar. Muchas cocinas de leña también tienen un horno integrado, que aprovecha ese mismo calor para hornear pan, bizcochos o asados como los de antes.

El calor sobrante se libera al ambiente, calentando la cocina o el salón, dependiendo de dónde la tengas instalada. Así, no solo te permite preparar las mejores comidas, sino que se convierte en un elemento calefactor más para tu casa, ayudándote a ahorrar en otros sistemas de calefacción.

Ventajas de una cocina de leña: Cocina, calor y mucho más

Si te estás preguntando por qué deberías plantearte tener una cocina de leña en lugar de un horno eléctrico o una moderna cocina de gas, déjame darte algunas razones de peso. Lo primero que vas a notar es la diferencia en el sabor. Cocinar con leña le da un toque especial a cada plato. El calor se distribuye de manera diferente, se cocina más lentamente y los alimentos adquieren ese ligero aroma ahumado que recuerda a las comidas tradicionales de toda la vida.

Pero las ventajas no se quedan en el sabor. Las cocinas de leña también son tremendamente eficientes a nivel energético. ¿Por qué? Porque, además de cocinar, calientan. Sí, dos pájaros de un tiro. En pleno invierno, mientras preparas un guiso o asas un buen trozo de carne, tu cocina de leña se encargará de mantener la estancia a una temperatura agradable y constante. Y no solo eso: algunas cocinas de leña modernas están preparadas para conectarse al sistema de calefacción de la casa, distribuyendo el calor generado por toda la vivienda a través de radiadores o suelo radiante.

Otra gran ventaja es la durabilidad. Estas cocinas están diseñadas para durar toda la vida. El hierro fundido, la piedra refractaria y los acabados en acero garantizan que puedes usarla día tras día, año tras año, sin que pierda ni un ápice de rendimiento. Además, las cocinas de leña tienen un mantenimiento muy sencillo. Basta con retirar las cenizas de vez en cuando y mantener la cámara de combustión limpia para asegurarte de que sigue funcionando a pleno rendimiento.

Tipos de cocinas de leña: Elige la que mejor se adapte a ti

Aunque a simple vista puedan parecer todas iguales, las cocinas de leña varían mucho en diseño y funcionalidad. Si buscas algo más compacto y versátil, las cocinas de leña pequeñas son perfectas para calentar una sola estancia y cocinar al mismo tiempo. Son ideales para casas rurales o para quienes quieren darle un toque rústico a su hogar sin hacer una gran inversión.

Si, en cambio, quieres aprovechar todo el calor que generan y distribuirlo por la casa, puedes optar por las cocinas de leña calefactoras. Estas cocinas no solo cocinan y calientan la estancia, sino que tienen un circuito de agua integrado que se conecta a los radiadores. De esta manera, cada vez que enciendes la cocina, estás alimentando todo el sistema de calefacción de tu casa. Y si buscas algo aún más completo, algunas cocinas de leña también ofrecen opciones de horno integrado, perfectas para quienes quieren sacar el máximo partido al calor generado.

¿Dónde instalar una cocina de leña?

A diferencia de otros electrodomésticos de cocina, una cocina de leña necesita una buena planificación para su instalación. Lo primero a tener en cuenta es la salida de humos. Todas las cocinas de leña requieren un tubo que evacúe los gases de la combustión, así que tendrás que situarla cerca de una pared exterior o una chimenea existente. Y, al igual que ocurre con las estufas, es recomendable que el lugar donde la coloques sea lo más céntrico posible, para que el calor se distribuya mejor por toda la casa.

Otro aspecto a considerar es el suelo. Aunque las cocinas de leña modernas están muy bien aisladas, es importante asegurarse de que la superficie donde se instalen sea ignífuga, por seguridad y para evitar cualquier accidente. Si tienes una cocina de estilo rústico, la cocina de leña se integrará a la perfección, convirtiéndose en el corazón del hogar, el lugar donde la familia se reúne no solo para comer, sino para disfrutar del calor y del ambiente que solo un fuego de leña puede ofrecer.

¿Cuánta leña necesitas y cómo almacenarla?

El consumo de leña dependerá del tamaño de la cocina, de la frecuencia de uso y del tipo de leña que utilices. Como regla general, cuanto más seca y densa sea la madera, mejor rendimiento obtendrás. Maderas como el roble o el olivo son perfectas para conseguir un calor duradero, mientras que maderas más blandas, como el pino, arden más rápido y generan menos calor. Por eso, es importante que planifiques bien cuánto leña vas a necesitar y la guardes en un lugar seco y ventilado.

Recuerda que la leña húmeda no solo genera menos calor, sino que también produce más humo y residuos, lo que te obligará a limpiar con mayor frecuencia. Lo ideal es tener un pequeño cobertizo o leñera donde puedas almacenar la leña, protegida de la lluvia y la humedad. Así, cuando llegue el frío, tendrás todo listo para encender la cocina y disfrutar del calor y el sabor de la cocina a leña.

El valor de una cocina de leña: Mucho más que un electrodoméstico

Invertir en una cocina de leña no es solo invertir en un sistema de cocción. Es apostar por un estilo de vida. Un estilo que te conecta con lo auténtico, con lo que de verdad importa. Desde el momento en que enciendes el fuego, sientes que la casa se transforma. Todo se ralentiza. La comida se cocina con mimo, el calor se reparte de forma suave y continua, y tú puedes disfrutar de cada instante como si retrocedieras en el tiempo, cuando las prisas no existían y cocinar era un acto casi ceremonial.

Por eso, si estás pensando en darle a tu hogar un toque diferente, en recuperar el sabor de las comidas de antes o en tener una fuente de calor extra para los meses fríos, una cocina de leña es justo lo que necesitas. Con su diseño robusto, su increíble durabilidad y ese toque inigualable que da el fuego natural, las cocinas de leña no solo alimentan el cuerpo… también alimentan el alma.

En BricoValera tenemos una selección de cocinas de leña pensadas para cubrir todas tus necesidades. Desde modelos pequeños y funcionales hasta auténticas joyas que se convierten en el corazón de la casa. ¿Te atreves a volver a lo tradicional? Prepárate para redescubrir el placer de cocinar como se ha hecho toda la vida: con tiempo, paciencia y el calor del fuego ardiendo.